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Jueves, 23 Marzo 2017 23:07

Encuesta Casen: La mitad de los menores de 5 años aún no asiste a la educación preescolar

jueves, 23 de marzo de 2017

Nacional

El Mercurio

Autoridades y expertos resaltan la importancia de aumentar la cobertura, por el desarrollo cognitivo que requieren los niños. Cultura familiar, ruralidad y capacidad están entre las razones que impiden la expansión.

Una de las áreas educacionales que históricamente ha quedado rezagada es la parvularia: esta nunca ha sido obligatoria -una ley lo hará con el nivel de kínder, pero aún no está en régimen- y las familias muchas veces prefieren no enviar a sus hijos a la sala cuna o al jardín, por ser muy pequeños o porque prefieren cuidarlos ellas.

De esta forma, la asistencia al sector nunca ha sido alta. En 1990, el 84,1% de los niños no iba a la educación preescolar, y la Encuesta Casen 2015, en su sección presentada ayer por el Ministerio de Desarrollo Social, muestra que ahora la mitad de los niños sigue sin asistir. De ellos, el 70,9% son de entre 0 y 3 años, y el 9,9% tiene entre 4 y 5 años.

El ministro Marcos Barraza resalta, en todo caso, el aumento que ha tenido la asistencia a este tipo de educación. Lo atribuye "a la asertividad y buena orientación en invertir recursos en niñez", y a las políticas públicas aplicadas, "como el programa Chile Crece Contigo, que ahora pasará de cubrir a niños de 0 a 5 años a menores de 0 a 9 años".

La subsecretaria de Evaluación Social, Heidi Berner, también destaca que "estamos en un camino ascendente, considerando que esta educación no es obligatoria". Sin embargo, explica que es prioritario incrementar la participación de la educación preescolar, pues "es muy importante que los niños tengan estímulos cognitivos y sociales desde muy pequeños, y por eso el fomento a los jardines infantiles y salas cunas".

A juicio de la subsecretaria, la razón por la que aún la cobertura se mantiene baja es porque "los padres creen que los niños no necesitan ir. Y quizás no necesitan ir desde el punto de vista del cuidado, pero desde el del desarrollo cognitivo, las políticas apuntan a que cada vez más los niños asistan tempranamente a la educación parvularia".

Actualmente, el Gobierno tiene en marcha una reforma en el sector, que busca abrir 80 mil nuevos cupos de salas cunas y jardines infantiles al término del período de Michelle Bachelet, de los cuales, cerca de 50 mil ya están abiertos.

La presidenta del Colegio de Educadores de Párvulos, María Soledad Rayo, añade que existe una necesidad incluso biológica de reforzar el sector. "En la medida que los niños tienen un mayor estímulo pedagógico y de entretención, van aumentando sus conexiones neuronales y eso los hace más inteligentes y adaptables, lo que no siempre tienen en sus hogares".

Según la profesional, la ruralidad y la falta de capacidad en las grandes ciudades también son impedimentos para aumentar la cobertura. Esto afecta sobre todo a quienes viven en ambientes más vulnerables: "Ellos debieran ir a la educación parvularia y no faltar nunca, para que todos los días adquieran aprendizajes".

Además, afirma Rayo, "en este minuto, no estamos en condiciones de cubrir todas las necesidades de esos niños a nivel país, por infraestructura y porque la gente que se está formando debe tener incentivos económicos para ir a zonas alejadas, lo que debe ser abordado en políticas públicas", ya que "todo niño debiera acceder a un cupo".

Un millón de pobres

Además de la asistencia a la educación parvularia, los resultados de la Encuesta Casen mostraron que en Chile existe más de un millón de niños que vive en la pobreza de ingresos y de condiciones de vida -es decir, en educación, salud, vivienda, entorno, entre otros factores-, equivalentes al 23% de los menores de 17 años del país. Pese a eso, esta cifra ha ido a la baja, ya que en 2009 el 30% era pobre.

Las principales áreas de carencias que tienen los hogares donde viven niños son la seguridad social, la escolaridad y las condiciones de vivienda.

Además, la medición reveló que el 20,5% de los niños están malnutridos (desnutrido, con sobrepeso u obesidad), que el 15,7% de las familias con niños dice haber sufrido discriminación, que un cuarto de los menores de edad participa en organizaciones sociales.